La Organización Mundial de la Salud dijo este martes que aún no hay evidencia de que la mutación del coronavirus recientemente identificada en algunos países de Asia por científicos de Corea del Sur cause una enfermedad más leve o sea menos mortal.
La epidemióloga líder de la OMS, María Van Kerkhove, aseveró que en este momento la Organización se encuentra trabajando con un grupo de especialistas para entender los cambios que puedan ocurrir en la secuencia genética del virus.
“Si aparece un artículo anunciando que hay una nueva mutación, esto puede asustar, pero estos cambios en los virus ocurren todo el tiempo. Hemos visto cambios en esta mutación del virus llamada D614G, que es algo que ha circulado desde febrero, y es la cepa que predomina en Europa y América del Norte, y ahora ha regresado a Asia”, explicó la experta.
Van Kerkhove destacó que lo imperativo es seguir monitoreando el virus para entender sus cambios y determinar cuáles mutaciones son importantes o lo hacen comportarse de manera diferente.
En cuanto a la diferencia en mortalidad entre países, la experta señaló que hay muchas razones por las que las fatalidades varían, en Corea del Sur, por ejemplo, los primeros infectados fueron personas jóvenes, con menos condiciones previas.
“Hasta el momento, más de 75.000 secuencias genéticas del coronavirus de países de todo el mundo están disponibles al público, algo que debe continuar”, expresó.