Entrevista al Dr. Jean-Marc Gabastou, asesor regional de la Organización Panamericana de la Salud (OPS)
CINU: ¿Nos puede por favor dar un balance de la situación del Nuevo Coronavirus?
Al día 4 de marzo, estamos oficialmente con más de 93.000 casos confirmados en el mundo, de los cuales un 90% en China. De estos casos confirmados, más de 3.000 casos fallecidos, la gran mayoría en China. Lo más importante es saber que la enfermedad se ha extendido a prácticamente 80 países en el mundo.
La situación en América Latina es que vimos nuestros primeros casos aparecer en Brasil, República Dominicana, Ecuador, Argentina, Chile y, recién, en México donde estamos a 5 casos confirmados.
¿Los mexicanos tienen que preocuparse por la situación?
La situación ha subido de un grado. Ahora, tanto el continente asiático como los demás países están en alto riesgo. ¿Qué significa eso? Que tenemos que acelerar los preparativos ahora en México, no ante la introducción porque ya tuvimos 5 casos importados relacionados todos con viajes con antecedente en Italia. Ahora tenemos que consolidar intensivamente los preparativos para detectar precozmente los casos que puedan continuar a entrar en el país.
El país reaccionó muy bien: detección temprana con una capacidad de diagnóstico extendido a los 32 estados del país. ¿Qué significa eso? Que hoy podemos detectar inmediatamente un caso, aislarlo, ya sea en su domicilio o en el hospital ante expresión clínica severa, para evitar el contacto con otras personas y una difusión del virus a casos secundarios. Son todos los esfuerzos que estamos haciendo actualmente: búsqueda activa de contacto, se les llama, se les informa, para que tomen las medidas de higiene básicas y fundamentales para limitar la propagación del virus y su transmisión de persona a persona.
¿Cuáles son estas medidas básicas?
Estas medidas básicas se encuentran en los sitios web de la OMS, de la OPS, y también de la Secretaría de Salud. El más esencial es el lavado de mano después de cualquier acción, que puede ser pagar en efectivo, pues los billetes pueden transmitir el virus, una actividad de cocina, cuando uno estornuda, y ahí estamos recomendando la etiqueta de tos en el ángulo interno del codo, el uso de mascarillas quirúrgicas para los pacientes sintomáticos aún leves de enfermedad respiratoria. Estas mascarillas no son para todo el mundo, sino para el paciente y también para el personal de salud que atiende a esta persona, y eso puede afectar a las personas en el hogar que atienden a las personas que le son asignadas en el domicilio ante a un diagnóstico positivo. Es un tema muy importante.
No acercarse o conservar una distancia de por lo menos un metro ante a una persona sintomática respiratoria, y obviamente desechar las servilletas de uso único en una bolsa a través de la basura.
¿Cuáles son los escenarios posibles?
Hay tres escenarios a nivel global y en este país:
- El primer escenario es el que vivimos, la introducción o importación de casos (5 casos confirmados en el país), y ahí se activa inmediatamente la contención y el aislamiento de estos pacientes sintomáticos leves en el domicilio, sintomáticos severos en el hospital, y los hospitales ya están identificados para su derivación con habitación de aislamiento y todo el tratamiento de soporte, que incluye eventualmente la intubación para la ventilación mecánica.
- El escenario dos, que tenemos que evitar sí o sí pero que es muy probable. En primer lugar, que se contaminen personas del círculo muy cercano (parientes y o personas de salud), que es un riesgo alto.
- Pero se puede extender a la comunidad, en otras palabras, tercera y cuarta generación. Vamos a observar clusters.
México tiene la capacidad institucional para enfrentar estos escenarios?
Estamos preparándonos ante los tres escenarios. Ya vimos que para el escenario uno el país está preparado: capacidad de detección, derivación, aislamiento domiciliario u hospitalario.
También estamos preparados para la atención de pacientes que no tendrían un antecedente de viaje en los países donde tenemos circulación evidenciada, que son cinco (China, Irán, Japón, Corea del Sur e Italia) por el momento, esto puede evolucionar muy rápidamente.
Los estados ya tienen la capacidad para detectarlos, diagnosticarlos y proceder con el mismo mecanismo con la intervención de brigadas que puedan atender a una comunidad un poco más grande, con los insumos, tanto de protección como de tratamiento paliativo. Ahí estamos con un levantamiento de la capacidad instalada, y la reserva estratégica que permita inmediatamente localizar, transferir estos insumos, recursos, talentos para atender y evitar la propagación masiva del virus en el país.
Y luego ya nos estamos preparando al escenario tres ante a una situación que podría eventualmente desbordar, colapsar los sistemas de servicios de salud, y para lo cual vamos a tener que atender a los pacientes para salvar vidas, evitar, limitar, mitigar la transmisión de persona a persona para que no se extienda más, y atender a las otras enfermedades transmisibles que no son el virus, o sea atender a la población general para que no haya una discontinuidad de los servicios de salud para estas enfermedades que también afectan a la población.