Periodismo e información pública deben ponderar protección de datos personales, señalan expertos en seminario de la UNESCO México

por | 10 junio 2020
Herramientas y plataformas de acceso a la información ratifican ser prioritarias en la observancia de la democrática y la rendición de cuentas.
La protección de datos personales y del derecho a la privacidad deben prevalecer en las prácticas de información pública mediante un ejercicio de ponderaciones, evitando que se coloque a personas en situaciones de riesgo y vulnerabilidad, y que la democracia, la transparencia y la rendición de cuentas sean vulneradas, coincidieron expertos de América Latina en la tercera sesión del seminario digital “Pandemia, democracia y derechos humanos”, organizado por la Oficina en México de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
 
Este seminario en organizado por la Oficina de la UNESCO en México, en colaboración con el Tec de Monterrey y el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) reunió a expertos de protección de datos, seguridad digital y libertad de prensa. Los panelistas analizaron el uso correcto y formas de protección de datos personales y de salud durante la pandemia por COVID-19, la protección de datos personales de periodistas y de sus fuentes, y el conocimiento y las prácticas de la protección de datos personales en México y América Latina.
 
En el acto de bienvenida del último de los seminarios organizados a propósito del Día Mundial de la Libertad de Prensa, participaron el Comisionado Presidente del INAI, Francisco Javier Acuña; la Vicepresidenta de Inclusión, Impacto Social y Sostenibilidad del ITESM, Inés Sáenz; y el Representante en México de la UNESCO, Frédéric Vacheron.
 
Al recordar que el derecho a la privacidad y la protección de datos personales permiten garantizar la democracia y el Estado de Derecho, Vacheron explicó que la UNESCO trabaja en el fortalecimiento de estos derechos a través de varios mecanismos, especialmente, con el desarrollo de los Indicadores de la Universalidad de Internet (2019), que se rigen bajo los principios DAAM (de Derechos Humanos, Apertura, Accesibilidad para todas las personas y de participación Múltiple), para la evaluación del ecosistema digital y ahora, también para el desarrollo de la Inteligencia Artificial.
 
Invitada a la mesa de discusión, Nayeli Roldán, periodista de Animal Político y ganadora del Premio Nacional de Periodismo, así como del Premio Ortega y Gasset, explicó que ante la necesidad de informar sobre el panorama de la pandemia por COVID-19, y atendiendo a la función social del periodismo, se debe valorar y ponderar la exposición de datos personales. Por ejemplo, el nombre y ubicación de personas portadoras de SARS-CoV-2, son datos sensibles que pueden ser omitidos, mientras que el estado de salud de los funcionarios públicos de primer nivel se presenta como de interés público, al impactar en la dinámica de la administración pública y de las personas con quienes trabajan.
 
Por otra parte, Roldán enfatizó que las herramientas y plataformas de acceso a la información pública confirman su carácter prioritario para la democracia y la rendición de cuentas. Y aunque reconoció que la emergencia sanitaria permite algunas excepciones como las adjudicaciones directas en la contratación de productos y servicios por parte de la administración pública, debe mantenerse la vigilancia sobre dichos procesos y su cumplimiento para detectar fallos y omisiones, como en el caso de la compra de ventiladores para hospitales públicos.
 
Por su parte, Jorge Rodríguez, Director de la Maestría en Ciberseguridad del TEC de Monterrey (ITESM), explicó que la protección de datos personales no sólo implica ponderaciones o acotación a los derechos de libertad de expresión y de acceso a la información, sino que incluso fortalecen la libertad de prensa. Por ejemplo, la ciberseguridad implica salvaguardar la disponibilidad (acceso a datos y activos), la integridad (que los datos no se modifiquen sin consentimiento) y la confidencialidad (evitar accesos no deseados a los activos) de los sitios y dispositivos, en este caso, de medios de comunicación, para no minar el ejercicio periodístico y la vitalidad del espacio cívico.
 
Por su parte, Diego García, catedrático de Derecho de la Universidad Iberoamericana, indicó que el derecho a la privacidad permite el acceso y disfrute de espacios de participación en sociedad, impulsar la creatividad y el desarrollo personal, por lo que un adecuado balance de estos derechos, ante el ejercicio de la libertad de expresión y la libertad de prensa, deben prevalecer.
 
En la última sesión del seminario también participaron Patricia Peña, Instituto de la Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile; Gaspar Pisanu, de la organización internacional AccessNow en Costa Rica; Josefina Román y Blanca Lilia Ibarra, comisionadas del INAI.