No se debe acelerar la creación de una vacuna a costa de la seguridad; El coronavirus afecta la capacidad de controlar la transmisión de enfermedades infecciosas en América Latina y el Caribe; La ONU apela a la solidaridad internacional para Líbano: Hoy es el Día Internacional de la Juventud, estas son las noticias de la ONU.
No se debe acelerar la creación de una vacuna a costa de la seguridad, advierte la OMS
El presidente de Rusia anunció que su país ha desarrollado y aprobado una vacuna contra el COVID-19 aún sin completar las pruebas clínicas que marcan los protocolos. La agencia encargada de la salud recuerda que no se debe sacrificar la seguridad y eficiencia a cambio de la velocidad. La OPS afirma que no adquirirá una inmunización que no cumpla con los ensayos requeridos.
“Necesitamos seguir invirtiendo y acelerando el desarrollo de tratamientos y vacunas sanas y efectivas que nos ayuden a reducir la transmisión y las muertes por COVID-19 en el futuro. Pero apresurar el progreso no quiere decir arriesgar la seguridad”, enfatizó este martes el portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En una conferencia de prensa virtual desde Ginebra, Tarik Jasarevic se refirió al anuncio hecho por el presidente ruso Vladimir Putin de que su país ha desarrollado y aprobado una vacuna contra el coronavirus que produce esa enfermedad.
El proyecto de vacuna de Rusia no estaba en la lista de los seis más avanzados que mencionó la semana pasada la OMS y que incluía tres vacunas en China, dos en Estados Unidos y una de la Universidad de Oxford.
La pandemia de la COVID-19 no representa la única amenaza a la salud en el continente americano, sino que también está alterando la capacidad de controlar la transmisión de otras enfermedades infecciosas, “muchas de las cuales hemos estado luchando por eliminar durante décadas”, afirmaba este martes la directora de la Organización Panamericana de la Salud.
Durante su encuentro semanal con los medios de comunicación para informar sobre la evolución de la enfermedad, Carissa Etienne afirmó que enfermedades como el dengue y la malaria representan una enorme carga en el sistema sanitario y, junto con muchas enfermedades tropicales, tienen un impacto desproporcionado en las poblaciones pobres y vulnerables, incluyendo las comunidades indígenas, como la COVID-19.
Por ello, y debido a la pesada carga del coronavirus en los sistemas de salud y a la interrupción de los servicios esenciales, Etienne alertó que está bajo amenaza el programa aprobado el mes de octubre por el cual los Estados miembros de la Organización se comprometieron a un enfoque regional para la eliminación de más de 30 enfermedades transmisibles y afecciones relacionadas para el año 2030 .
Otro claro ejemplo es el del VIH, un vius del que se conocen modos de prevención y tratamiento, del que se dispone de datos que indican que el 30% de las personas que viven con él evitan acudir a los servicios de salud durante la pandemia y que, al mismo tiempo, los países tienen un suministro limitado de antirretrovirales.
A esta cifra se le ha de añadir que un tercio de los países de América Latina también están experimentando interrupciones en las pruebas de detección de la hepatitis que son clave para la detección temprana y el tratamiento de la enfermedad.
La ONU apela a la solidaridad internacional para Líbano y pide investigar la explosión
El líder de las Naciones Unidas urge a los donantes a actuar y afirma que la Organización seguirá asistiendo a Líbano en la emergencia. También destaca el enojo de los libaneses por el siniestro y pugna por una investigación creíble. En un evento sobre la situación humanitaria del país, el coordinador de Ayuda Humanitaria, por su parte, advierte que la recuperación y reconstrucción costará miles de millones de dólares y que requerirá financiamiento público y privado.
El Secretario General de la ONU expresó su solidaridad con el pueblo libanés y adelantó que las reverberaciones económica y social del estallido se seguirán sintiendo en los meses por venir y agregó que para aliviar las necesidades inmediatas de la población, el sistema de las Naciones Unidas ha emprendido un amplia respuesta que incluye el suministro de equipos médicos y humanitarios, así como financiamiento para otras provisiones urgentes.
“La explosión vino en un momento de por sí difícil para Líbano, que ya encaraba adversidades económicas y el impacto del coronavirus. Aún así, el pueblo libanés ha mantenido su generosidad acogiendo a los refugiados palestinos y sirios”, dijo António Guterres, destacando el espíritu solidario de los libaneses.
Ahora, la comunidad internacional debe mostrar su solidaridad con Líbano, agregó Guterres y agradeció a los países que se apresuraron a aportar apoyo financiero y material tras el desastre.
Con respecto a las protestas registradas en los últimos días en la capital libanesa, señaló que en medio de la tristeza y la frustración prolongada, es palpable el enojo del pueblo de Líbano. “Sus voces deben ser oídas”, añadió.
En este sentido, instó a iniciar una investigación “creíble y transparente que determine la causa de la explosión y conduzca a la rendición de cuentas que claman los libaneses”.
Hoy es el Día Internacional de la Juventud
El tema de este año es “Compromiso de la juventud para la acción mundial” y pone de relieve las formas en que las voces y el activismo de la juventud están marcando la diferencia y acercando nuestro mundo a los valores y la visión de la Carta de las Naciones Unidas.
El Día de la Juventud de este año tiene lugar mientras las vidas y aspiraciones de los jóvenes continúan viéndose alteradas por la pandemia del COVID-19. Algunos han perdido la vida y muchos han visto morir a familiares y otros seres queridos.
Pero esta generación también es resiliente, ingeniosa y comprometida.
“Es constructora de la paz promoviendo la cohesión social en un momento de distanciamiento físico, impulsando el fin de la violencia a nivel mundial y abogando por la armonía en un momento de creciente odio.
Muchas son mujeres jóvenes que han estado en la vanguardia en la movilización por la justicia y la acción climática, al tiempo que han servido en la primera línea en la respuesta al COVID-19.
Hacer realidad la promesa de esta generación significa invertir mucho más en la inclusión, la participación, las organizaciones y las iniciativas de la juventud.”