La Organización Mundial de la Salud advirtió a los jóvenes de los efectos a largo plazo que puede conllevar el COVID-19.
La Organización Mundial de la Salud ha advertido a los jóvenes de los efectos a largo plazo que puede conllevar el COVID-19.
Los especialistas explicaron que, aunque la mayoría de los jóvenes que se contagian no tienen que ser hospitalizados y se recuperan, una “minoría significativa” tiene problemas prolongados.
Está claro que una “buena proporción” de las personas que desarrollan la enfermedad de forma moderada sufre después fatiga u otros problemas respiratorios y no puede hacer ejercicio.
El doctor Mike Ryan explicó que el coronavirus causa un proceso inflamatorio en los alveolos y vasos sanguíneos de los pulmones. Una vez que pasa la enfermedad lleva tiempo recuperar estos órganos e incluso puede afectar al sistema cardiaco.
Por ello dijo, los jóvenes que deciden llevar un estilo de vida sano, cuidan su alimentación o van al gimnasio, deberían también hacer todo lo posible para no contraer el COVID-19.
“Esperamos y muchos se recuperan lentamente. ¿Pero quién quiere pasar, tres o seis meses e incluso un año recuperándose de una enfermedad que duró 10 días y que podías prevenir?”
Con información de Noticias ONU