La respuesta mundial al COVID-19 debe abordar los derechos y las necesidades de las mujeres y las niñas

por | 7 mayo 2020

Por Mark Lowcock, Secretario General Adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador del Socorro de Emergencia, Natalia Kanem, Directora Ejecutiva del Fondo de Población. Articulo de opinión publicado en el diarió El Excelsior el 7 de mayo de 2020.

En una semana en la que a personas de algunas partes del mundo se les ha dado motivo de optimismo por haber superado el pico de la pandemia, hemos visto cómo las acciones extraordinarias de algunos individuos pueden cambiar la trayectoria de toda una nación.

Médicos y médicas jubilados poniéndose de nuevo en la primera línea, enfermeras haciendo sus propias mascarillas para poder tratar a los enfermos, padres separados de sus hijos para cuidar a personas que sufren del virus.

En la mayoría de los casos se trata de mujeres. A nivel mundial, las mujeres constituyen 70% del personal de salud. También desempeñan la mayoría de las funciones de cuidado en los hogares y en las comunidades. Las mujeres realizan esta labor esencial a pesar de los obstáculos y las desigualdades.

Por eso la actualización de nuestro Plan de Respuesta Humanitaria Global para combatir el coronavirus, publicado hoy, tiene a las mujeres en el centro. Sabemos, por experiencia, que invertir en mujeres y niñas produce dividendos para todos. Lo vemos nuevamente con el COVID-19.

En los hospitales y en los hogares, las mujeres están en primera línea en esta lucha contra el COVID-19. Sabemos que las acciones locales se traducen en beneficios globales. Si hay algo que hemos aprendido sobre esta pandemia es que el mundo se ha unido para enfrentarla y sólo podemos derrotarla si actuamos como uno solo.

Según la Organización Internacional del Trabajo, las mujeres realizan 76% del total de horas de trabajo de cuidado no remunerado a nivel mundial. Ellas sobrellevarán el mayor peso del cuidado de los enfermos y ayudarán a detener la propagación del virus.

Debemos equipar a las mujeres con lo que necesitan. Hagamos posible que se mantengan seguras y con apoyo. Es lo correcto y también lo más inteligente para que puedan seguir salvando y mejorando vidas…

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