México se ha dotado de un sistema integral de vigilancia y ha optado por un sistema de muestreo inteligente, eficiente, seguro y de calidad

por | 23 agosto 2020
  • La Organización Mundial de la Salud está validando nuevas pruebas de diagnóstico rápido basado en la detección de antígenos que permitan realizar un diagnóstico inmediato, “al pie del paciente”.

Ciudad de México, 23 de agosto de 2020 – la cuestión no es saber si se están haciendo suficientes pruebas para diagnóstico de COVID-19, sino saber si se están haciendo bien, afirmó el asesor regional en Emergencias en Salud de la OPS/OMS, Jean-Marc Gabastou, durante su intervención en la conferencia sobre la situación de COVID-19 el día de ayer.

Este país a través de su joya tecnológica y centro colaborador de la OMS, el InDRE, Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos, fue el primero en reaccionar, implementando la técnica molecular de diagnóstico, la única técnica validada para establecer un diagnóstico de certeza y precisión, incluso antes de que se declarara la emergencia de salud pública de importancia internacional, siendo así México, el primer país de la región en hacerlo.

Esa técnica de diagnóstico se ha replicado mediante capacitaciones e implementación en cada una de las entidades federativas a través de 150 laboratorios del país, de los cuales 67 son laboratorios privados.

Si bien el laboratorio es un elemento esencial en la vigilancia para la detección; el aislamiento de los pacientes, su valoración y atención temprana, salva vidas.

Así mismo, para monitorear la magnitud, las características y la tendencia de la epidemia en el país con objeto de tomar medidas de salud pública, el laboratorio no es la única herramienta de vigilancia; este país se enorgullece de un robusto sistema de vigilancia centinela universal y por evento para inmediatamente intervenir ante grupos de riesgo, ante sitios de riesgo y tratar de cortar la expansión desde su punto de origen.

Así mismo, debemos considerar que la ocupación hospitalaria no se ha desbordado, gracias a una exitosa reconversión y ampliación del sistema y finalmente, se ha lanzado una nueva herramienta de evaluación del exceso de mortalidad para permitir, a través de un sistema de alerta, intervenir rápidamente en las entidades federativas correspondientes.

Este país se ha dotado de un sistema integral de vigilancia y ha optado por un sistema de muestreo inteligente, eficiente, seguro y de calidad. Es más, la Organización Mundial de la Salud está validando nuevas pruebas de diagnóstico rápido basado en la detección de antígenos, un poco similar a la molecular, pero ahí detectamos partículas virales que permitan realizar un diagnóstico inmediato, “al pie del paciente”, es decir, el tan esperado Point-Of-Care, que permita desde el nivel local y en lugares remotos, la orientación y la deliberación del paciente a las unidades hospitalarias.

Y no dudamos de que este país se va a dotar de esa herramienta para apoyar y consolidar la iniciativa de Atención Primaria de Salud (APS) desde un Primer Nivel de Atención (PNA) centrada sobre la persona, la familia y la comunidad.

En resumen, se está ampliando y diversificando la capacidad de respuesta a través de una herramienta de calidad, que es el diagnóstico de laboratorio y, dos, se está expandiendo a nivel territorial esa capacidad con una cobertura total, hablamos de las comunidades apartadas y la población indígena que la OMS identifica como grupos altamente vulnerables en la Región.