Los casos sobrepasan los 300.000 en todo el mundo y aunque no salir de casa y el distanciamiento físico son medidas que ayudan a frenar la propagación, son solo estrategias defensivas. Es momento de atacar el virus con tácticas agresivas y específicas, como identificar y aislar cada caso sospechoso e implementar cuarentenas completas cuando sea necesario.
“Pedirle a la gente que se quede en casa y otras medidas de distanciamiento físico son una forma importante de frenar la propagación del virus y ganar tiempo, pero son medidas defensivas. Para ganar, necesitamos atacar el virus con tácticas agresivas y específicas: probar cada caso sospechoso, aislar y cuidar cada caso confirmado, y rastrear y poner en cuarentena cada contacto cercano”, afirmó Tedros Adhanom Ghebreyesus.
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